Vías y Obras

El principal cometido del Servicio de Vías y Obras es la Red Provincial de Carreteras, con casi 2.300 km de longitud de titularidad de la Diputación, por lo que se encarga de su conservación, explotación, ampliación y mejora, vialidad invernal, vigilancia, defensa y demás aspectos relacionados con las mismas.

Las diputaciones se han ocupado desde su creación de determinadas redes viarias, y en 1925, mediante normativa específica, se crearon para este fin las secciones de Vías y Obras Provinciales, de manera que se ha configurado la actual red de carreteras que son las contenidas en el inventario actual. Están reguladas por la Ley 10/2008, de 9 de diciembre, de Carreteras de Castilla y León.

Dada la particular estructura de población de la provincia con su gran número de núcleos, su extensión, orografía y clima, la red de la Diputación es de gran importancia para la accesibilidad en amplias zonas del territorio y de núcleos de población de pequeño tamaño.

La gestión de la red se lleva a cabo a través de medios propios y de obras financiadas por la Diputación encuadradas en sus presupuestos en distintos planes provinciales y capítulo de inversiones.

Con bases en el Parque de Maquinaria de Burgos y en Villarcayo hay tres brigadas de obras y diversa maquinaria pesada para la ejecución de trabajos directamente por administración, para mantenimiento, incluida la vialidad invernal También personal de vigilancia y defensa y control de las carreteras y sus obras contiguas. A estos efectos la provincia está dividida en dos zonas: Zona Norte y Zona Sur cuya línea divisoria es la carretera nacional N-120.

Además se redactan los proyectos necesarios y se dirigen las obras correspondientes, así como cualesquiera actuaciones técnicas necesarias para los fines descritos. Igualmente se colabora al mantenimiento y mejora de las carreteras de titularidad municipal, mediante los instrumentos establecidos por la Diputación.