A pesar de las labores de concienciación llevadas a cabo desde administraciones, asociaciones y otras entidades para erradicar el maltrato animal, y de la creciente sensibilización de los ciudadanos en este sentido, el abandono de animales de compañía (principalmente perros) sigue siendo una triste realidad en algunos de nuestros municipios, principalmente durante los meses de verano. De conformidad con la Ley 5/1997, de 24 de abril, de Animales de Compañía de Castilla y León, que designa en los ayuntamientos (o de forma subsidiaria en las Diputaciones) la competencia del servicio de recogida de animales de compañía abandonados o extraviados, la Diputación Provincial de Burgos y las Entidades Locales de la provincia con población inferior a 20.000 habitantes tienen establecido desde el año 2004 un Convenio Marco para el desarrollo de esta competencia de carácter municipal. Realizada en 2010 una renovación del concurso para la prestación de este servicio, actualmente es la empresa Residencia Canina Ramos, ubicada en Castañares, la adjudicataria del mismo, prestando sus servicios para los ayuntamientos de la provincia desde el mes de abril de 2010. Durante el primer año de prestación del nuevo servicio se ha constatado que las condiciones higiénico-sanitarias en las recogidas de los animales abandonados o extraviados y en su estancia en las instalaciones actuales son satisfactorias.
Una de las ventajas obtenidas con la nueva adjudicación del servicio ha sido la mejora en la localización de los dueños de los animales una vez recogidos, ya que actualmente se presta especial interés en esta localización para evitar estancias innecesarias de los animales en las instalaciones de recogida. Prueba de ello es que el número de animales retirados por sus dueños ha sido superior al número de animales recogidos con chip identificador, lo que demuestra el esfuerzo desarrollado en la localización de los dueños de los animales.
Durante las recogidas y en las instalaciones de acogida siguen existiendo casos en los que es necesario practicar la eutanasia de animales cuyos dueños no han podido ser localizados y que presentan, tras su abandono, lesiones graves, enfermedades infecto-contagiosas o comportamientos extremadamente agresivos que ponen en peligro la seguridad del personal y del resto de animales. A pesar de ello, se siguen realizando importantes esfuerzos en la localización inmediata de los dueños y en facilitar la adopción de los animales abandonados (para lo que se cuenta con la colaboración de otros países europeos). Con el objetivo de reducir al mínimo el número de eutanasias practicadas, la empresa adjudicataria del servicio comenzó en diciembre de 2010 una colaboración con el equipo de voluntariado del proyecto “Sacrificio Cero en Burgos”, impulsado por la antigua Asociación Protectora de Animales “Las Merindades” para promover y gestionar adopciones de animales. Gracias a este proyecto, cuyo objetivo es evitar los sacrificios que se ven obligados a realizar los servicios de recogida, se ha creado una red de voluntarios y colaboradores para conseguir las acogidas temporales o adopciones definitivas de todos los animales procedentes de estos servicios. Para ello se utilizan campañas de información a diferentes niveles y se hace uso de las redes sociales en la búsqueda de personas que deseen adoptar. Gracias a la colaboración entre el servicio de recogida de animales de la Diputación Provincial y el proyecto “Sacrificio Cero en Burgos”, el porcentaje de adopciones en los últimos cuatro meses ha aumentado hasta el 57% y la empresa adjudicataria mantiene de forma continua a varios ejemplares en las instalaciones de forma que el número de eutanasias practicadas desde el 1 de diciembre de 2010 se ha reducido a cero, consiguiendo de este modo el objetivo del proyecto.